El sueño afecta de forma directa a la calidad de vida, la salud y el desempeño en las actividades diarias del individuo. Por esta razón, es fundamental tener una buena calidad del sueño.
En el corto plazo, una mala noche de sueño causa cansancio, somnolencia diurna, dolores de cabeza, además de una mayor tendencia a cometer errores y tener accidentes. Esto se debe a que se presentan dificultades en la memoria, concentración y control motor. Ahora bien, ¿cuáles son las consecuencias a largo plazo de una mala calidad del sueño?
En el presente artículo, abordaremos el tema de la calidad del sueño en las mujeres, un reconocido indicador de salud y calidad de vida.
¿Por qué las mujeres necesitan dormir más que los hombres?
Existen varias razones por las cuales las mujeres pueden necesitar de más horas de sueño que los hombres. En primer lugar, las mujeres tienen 40% más de probabilidad de padecer insomnio que los hombres. Además, las mujeres tienen casi el doble de probabilidad de diagnóstico de depresión y ansiedad, dos trastornos que están notablemente ligados al insomnio. Las personas con insomnio tienen una dificultad habitual para iniciar o mantener el sueño y sufren de somnolencia diurna.
En segundo lugar, las hormonas pueden ser otra razón para las diferentes necesidades de sueño. Las hormonas son aquellas que gobiernan el ciclo sueño-vigilia e interfieren en situaciones como el cansancio, el estado de alerta y el hambre. A lo largo de su vida, las mujeres pueden pasar por alteraciones hormonales todos los meses y esto no solo afecta sus ritmos circadianos, sino que también puede crear una mayor necesidad de sueño.
Según el censo efectuado en 2022 por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE, por sus siglas en portugués), la expectativa de vida de la mujer en Brasil es de 79,0 años. La mayoría de las mujeres de hoy en día vive lo suficiente como para entrar en la menopausia y, por lo menos, vivir 30 años más luego de su última menstruación. El período de climaterio de la mujer varía entre los 40 y los 65 años, por lo que, de acuerdo a esta información, pasa una gran parte de su vida dentro de esta etapa. Muchas mujeres pasan por la transición de la menopausia con pocos o ningún síntoma, mientras que un pequeño porcentaje de mujeres padece síntomas lo suficientemente graves como para interferir en su capacidad de desempeño rutinario. Por lo general, los reclamos más frecuentes involucran sofocos, sudoración nocturna, insomnio, cambios de humor, fatiga y somnolencia diurna excesiva.
El climaterio es un período transitorio entre la vida reproductiva y no reproductiva de la mujer. Durante esta etapa es cuando se presentan los trastornos del sueño debido al desequilibrio hormonal y el declive en la producción de estrógeno, es decir, hormonas que se asocian a la regulación del sueño de la mujer. Los sofocos y la sudoración que acompañan al desequilibrio hormonal también pueden ocurrir durante la noche y, en consecuencia, obstruir el sueño. Es importante prestar atención a la frecuencia de estos episodios para que el trastorno no se vuelva algo crónico. La higiene del sueño y la actividad física también juegan un papel importante durante la transición hacia la menopausia.
Los episodios del climaterio duran, en promedio, tres minutos y se intensifican durante la noche. De esta forma, ocurren despertares frecuentes que determinan la fragmentación y la pérdida de calidad del sueño. Durante este período de climaterio, además de los síntomas típicos como los sofocos, sudoración nocturna, dolores musculares, dolor de cabeza, reducción de la libido y cambios en el estado de ánimo, también se presentan otros acontecimientos que, por lo general, los médicos pasan por alto: el insomnio o incluso la apnea obstructiva del sueño (SAOS).
En el año 2013, la Southern Medical Association [Asociación Médica del Sur Estadounidense] publicó un artículo titulado “Major Sleep Disorders Among Women (Women’s Health Series)” [Los trastornos del sueño principales en las mujeres (salud de la mujer)] (fuente: https://sma.org/southern-medical-journal/article/major-sleep-disorders-among-women-womens-health-series/). En dicho artículo, se resalta el hecho de que las mujeres tienen una mayor incidencia que los hombres de padecer insomnio y depresión a partir de la falta de sueño. Las mujeres son más propensas que los hombres a quejarse por insomnio, dolor de cabeza, irritabilidad y fatiga que por los síntomas “típicos” de ronquido alto e interrupción de la respiración durante el sueño. No obstante, la mortalidad cardiovascular es alta en mujeres con apnea obstructiva del sueño.
Con el objetivo de combatir el insomnio durante este período, los especialistas aconsejan adoptar una higiene del sueño. A continuación, enlistaremos algunas recomendaciones:
- Acostarse y levantarse de forma habitual a la misma hora, incluso los fines de semana.
- Realizar actividad física, preferentemente por la mañana o por la tarde.
- Evitar bebidas estimulantes en la noche, como café, té negro, refrescos o bebidas energéticas.
- Cenar temprano y priorizar comidas ligeras.
- Evitar el consumo de bebidas alcohólicas.
- Disminuir la exposición a la luz durante la noche.
- Mantener el cuarto libre de luces o ruidos.
- Tomar un baño caliente.
- Realizar actividades relajantes por la noche, como leer, pintar, bordar, escuchar música tranquila y meditar.
Recuerde: si la dificultad para conciliar el sueño o mantenerlo a lo largo de la madrugada se vuelve algo persistente, consulte con su médico. Existen tratamientos específicos para corregir esta situación.
Apnea del sueño en las mujeres
La apnea obstructiva del sueño es una enfermedad que se caracteriza por la obstrucción de vías aéreas superiores durante el sueño. Por lo general, esta obstrucción va acompañada de una baja saturación de oxígeno en sangre, seguida de un breve despertar durante la noche para poder respirar.
A simple vista, puede parecer una enfermedad de fácil diagnóstico. Sin embargo, al menos en lo que concierne al sexo femenino, no siempre es el caso. Esto se debe a que las características cambian, ya que el ronquido de las mujeres es más leve y el sonido es más discreto que el de los hombres. Además, estos episodios son más cortos, por lo que hay varios casos en los que ni el compañero de cama ni el paciente los detecta.
La apnea obstructiva del sueño es dos veces más común en los hombres, aunque este trastorno aumente en mujeres mayores a 50 años. Aparte del ronquido, los síntomas asociados a la apnea son la somnolencia diurna excesiva, fatiga, jaqueca, depresión, ansiedad, taquicardia, alteraciones cognitivas, falta de productividad, entre otros. De estos surge la dificultad de diagnóstico.
La obesidad y la edad avanzada son los dos mayores factores de riesgo para la apnea del sueño. A lo largo de la menopausia, las mujeres pasan por alteraciones hormonales que provocan un aumento en la grasa abdominal, así como la disminución en los niveles de progesterona. Ambos factores pueden ser una explicación del aumento del riesgo de apnea del sueño.
Existen otros factores que pueden influir en el surgimiento de apnea del sueño en las mujeres:
- Menstruación: un tercio de las personas que menstrúan tienen problemas para dormir debido a cólicos, dolores de cabeza e hinchazón. Se reportan niveles más elevados de somnolencia diurna, cansancio y fatiga.
- Embarazo: durante el embarazo, las mujeres pueden desarrollar el síndrome de las piernas inquietas, lo que dificulta conciliar el sueño. Las embarazadas también tienen mayor probabilidad de sufrir de depresión, apnea del sueño, dolor e incontinencia urinaria, lo que, en consecuencia, obstruye el sueño. Estos problemas de sueño pueden continuar durante el período postparto, cuando los niveles hormonales disminuyen y al mismo tiempo comienza el cuidado de un recién nacido con un ciclo de sueño irregular, lo que a menudo resulta en aún más somnolencia diurna.
- Menopausia: durante la menopausia, hasta el 85% de las mujeres pueden experimentar sofocos. Cuando estos ocurren por la noche, las mujeres se despiertan sudando y, por ende, se perturba el sueño. El riesgo de desarrollar apnea del sueño también aumenta durante la menopausia, ya que causa más cansancio y somnolencia diurna excesiva.
A largo plazo, las consecuencias de la apnea del sueño son potencialmente graves o mortales. Esto refuerza la necesidad de un diagnóstico y tratamiento lo antes posible.
Este trastorno del sueño puede empeorar o causar, entre otros, los siguientes problemas:
- Enfermedades cardiovasculares (insuficiencia cardíaca, latidos cardíacos irregulares o arritmia, infarto, hipertensión, entre otras).
- Diabetes.
- Accidente cerebrovascular (derrame cerebral).
- Jaqueca.
- Problemas cognitivos como la falta de memoria, concentración y atención.
- Aumento de peso.
- Demencia (causada por el Alzheimer).
- Depresión.
Para diagnosticar el trastorno que interfiere con la eficiencia del sueño , la polisomnografía es el examen de elección, en conjunto con un examen clínico y físico.
Además del conocido examen en donde se duerme en un laboratorio del sueño rodeado de equipos no muy amigables, existe la solución de Biologix . El Examen del Sueño Biologix®es una polisomnografía tipo IV que cuenta con canales de saturación de oxígeno, frecuencia cardíaca, actimetría y ronquido (mediante el micrófono del celular). Se trata de un examen simple, práctico y eficaz que se realiza en casa. Asimismo, los profesionales de la salud lo emplean para diagnosticar y tratar la apnea del sueño. A la hora de dormir, el paciente solo debe colocarse el sensor Oxistar®, un oxímetro de alto rendimiento, en el dedo e iniciar el examen en la aplicación de Biologix. Al terminar el examen la mañana siguiente, el resultado estará disponible en el portal de exámenes en cuestión de segundos.
Para trazar un tratamiento de apnea del sueño, primero debe considerarse el grado de la misma. Por lo general, para los casos graves, la mejor indicación es el CPAP (del inglés Continuous Positive Airway Pressure [presión positiva continua en la vía respiratoria]). Este dispositivo mejora la calidad de vida, reduce el riesgo de accidentes cerebrovasculares y problemas cardiovasculares. Esta terapia del sueño mantiene la presión adecuada de las vías aéreas; su uso no solo revierte la apnea de forma inmediata, sino que también disminuye la somnolencia y eleva la calidad de vida, el estado de alerta y el humor.
Además del CPAP, para los casos leves o moderados, la indicación de aparatos intraorales (AIO) es una excelente alternativa. Estos aparatos están diseñados para posicionar la mandíbula más hacia adelante. Esto permite que la vía respiratoria en la garganta permanezca desobstruida. Aunque se necesita un período de adaptación, controles periódicos y ajustes, las personas suelen tener mucha facilidad con el uso del aparato intraoral.
La terapia de reemplazo hormonal también ayuda a mejorar la calidad del sueño de las mujeres durante la menopausia. Sin embargo, antes que nada, es importante conversar con un ginecólogo para evaluar los riesgos y beneficios de este tipo de tratamiento y tenerse en cuenta el historial de cada mujer. Además de la pérdida de peso, para la disminución de la circunferencia abdominal.
Asimismo, es relevante efectuar cambios en el estilo de vida. Por ejemplo: gestionar horarios regulares para dormir y despertar, realizar actividad física por la mañana, preparar comidas ligeras en la cena, practicar actividades relajantes y suspender el consumo de alcohol y tabaco.
Es importante resaltar que las mujeres relatan sus problemas de sueño de manera diferente a los hombres. Por ejemplo, las mujeres que buscan tratamiento para la apnea del sueño tienen mayor probabilidad de enfocarse en síntomas como la fatiga y la depresión, mientras que los hombres describen ronquidos y falta de aire durante el sueño. Esto puede resultar en que se diagnostique a menos mujeres o que se las diagnostique incorrectamente con insomnio cuando la apnea del sueño es la condición subyacente.
Para concluir, hay que tener en cuenta que alrededor del 85% de los pacientes con apnea del sueño en el mundo no cuentan con el diagnóstico del trastorno. Por eso destacamos la importancia de que los médicos y los pacientes reconozcan y traten los primeros signos y síntomas de la apnea obstructiva del sueño.
Busque ayuda y duerma mejor.
El presente contenido fue desarrollado por el equipo de Biologix. Biologix es una empresa fundada con el objetivo de revolucionar el diagnóstico de la apnea obstructiva del sueño (SAOS), para así reforzar la importancia y el impacto de la apnea en la calidad de vida de la población.
